La ciudad de Munch, Alemania, es uno de los centros industriales y tecnológicos del país, atrayendo residentes de todo el mundo gracias a la constante demanda de trabajos calificados.
Los precios de compra de viviendas muestran un crecimiento que muchos describen como una burbuja inmobiliaria, con un promedio de 5000 EUR/m2 en 2016 a 7500 EUR/m2 en 2020, lo que lleva a un crecimiento de 50%. Los precios no solo crecen por la bonanza económica y situación estratégica de la ciudad, las facilidades de financiamiento son excelentes, las entidades financieras brindan préstamos con intereses cercanos a 0%.
Los constituyentes del mercado son el clásico comprador/inversor, promotor inmobiliario, constructores y entidades financieras. El mercado inmobiliario está fuertemente regulado, las leyes protegen fuertemente a los propietarios e inquilinos, los agentes inmobiliarios tienen por ley un porcentaje de 4% sobre la operación de compraventa. Una gran parte de los pisos están destinados a inversores con intención de ofrecer vivienda en alquiler.
The Financial Times en su artículo “La década de los bienes raíces” del 4 de junio de 2020 describe la situación de la industria inmobiliaria en Alemania, con especial atención a las propiedades comerciales.
La ciudad de Frankfurt tuvo un auge en el centro financiero de 33 EUR/m2 en 2010 a 41 EUR m2 en 2020, sin embargo, los precios han caído 6,5% desde la crisis del COVID-19
Las 7 grandes ciudades de Alemania han disfrutado de un aumento en la última década. JLL argumenta que los inversores califican los bienes raíces comerciales como caros, una señal de que se ha alcanzado el pico de precios.
El paralelismo de la crisis del COVID-19 con la crisis financiera mundial de 2008 son habituales, y el Financial Times no lo es menos. Europa experimentó un gran aumento en el espacio comercial disponible y precios de alquiler más bajos durante la crisis financiera, pero en esta nueva crisis, Sonja Förster de DBRS Morningstar argumenta que Alemania está mejor preparada gracias a los contratos de arrendamiento a largo plazo. El periódico también argumenta que los bancos nacionales y privados no presentan un gran riesgo gracias a los bajos índices de morosidad, los préstamos con cobertura, las generosas ayudas a los trabajadores a tiempo parcial y los saludables índices de endeudamiento.
El pronóstico del Financial Times es consistente con el estado de cuentas intermedio de Consus Bienes Raíces AG el 29 de julio de 2020. El impacto de la crisis del COVID-19 no ha afectado a esta gran inmobiliaria alemana con presencia en las 7 grandes ciudades. La compañía ha cumplido con las expectativas de crecimiento y reducción de deuda. Además, mantiene su previsión para el resto del año, argumentando que el impacto de la crisis será muy limitado para ellos.